
Si hay marcas que tienen citas anuales más o menos fijas en el calendario para desvelar sus smartphones de referencia, Apple es posiblemente la más estricta con el momento en que enseña al mercado cómo será su próximo iPhone, así como el de la puesta a la venta, que no se retrasa más que unas semanas desde que hace acto de presencia en el evento.
Así que estamos en la primera mitad de octubre y eso significa nuevo iPhone 6s y 6s Plus en el mercado y cómo no en nuestra mesa de pruebas. Tras una semana poniéndolo a prueba, llega el momento del análisis del iPhone 6s Plus de Xataka y hablaros de cómo Apple pretende aumentar su cuota de mercado en importantes mercados.
iPhone 6s Plus: renovación de año “s”
Quien mire un iPhone del año pasado y el nuevo modelo de 2015 no podrá determinar de forma directa qué modelo se corresponde con cada año. Como cada “generación s” del iPhone, las similitudes estéticas son casi totales, y las novedades se encuentran en componentes internos y tecnologías que se estrenan con el nuevo modelo, como en este caso es el 3D Touch.
iPhone 6s Plus, características técnicas | |
---|---|
Dimensiones físicas | 158,2 x 77,9 x 7,3 milímetros, 192 gramos |
Pantalla | IPS LCD 5,5 pulgadas |
Resolución | 1920x1080 píxeles (401 ppp) |
Procesador | Apple A9 (2 x 2,0 GHz, 64 bits), Coprocesador M9 con activación por voz |
RAM | 2 GB |
Memoria | 16 / 64 / 128 GB (no ampliable) |
Versión software | iOS 9 |
Conectividad | LTE Cat 6, NFC, Bluetooth 4.2, Wi‑Fi ac |
Cámaras | Posterior de 12 MP, 1,22 micrometros por pixel, apertura f/2.2 Grabación 4K a 30 FPS, 1080p 60 FPS Frontal de 5 MP con Retina flash |
Batería | 2750 mAh |
Precio | Desde 859 euros |
El principal protagonista de las renovaciones interiores de los iPhone es el procesador. En este iPhone 6s Plus nos encontramos con el SoC A9 con arquitectura ARM (un dos núcleos a 2 GHz y 64 bits) y el paso por fin a los 2 GB de memoria RAM.
Como veremos en el apartado correspondiente, esas cifras que parecen alejadas de lo que se estila en la gama actualmente, logran hacer frente sin ningún problema a las combinaciones de 8 núcleos y 4 GB de memoria RAM de la competencia, lo que demuestra que controlar hardware y software es todo un acierto para Apple.

Ese SoC A9 tiene integrado el coprocesador M9, cuya aportación clave para este iPhone 6s Plus es permitir que la activación de Siri se pueda realizar por voz incluso cuando el dispositivo está en reposo.
La renovación interna del iPhone 6s Plus ha sido excelente excepto por el empecinamiento en mantener unos ridículos 16 GB de memoria interna
A nivel de comunicaciones tenemos un Qualcomm MDM9635M fabricado con tecnología de integración de 20 nm y soporte de LTE Cat6 como detalles más significativos.
En esta ficha técnica vuele a ser muy relevante el mantenimiento de una versión de entrada de 16 GB, inexplicable y que empeorará mucho la experiencia de usuario de quien opte por esta versión teniendo en cuenta que es todavía un terminal el de este año que aspira a introducir más cantidad de GB en menos tiempo.
Si un usuario ya queda frustrado cuando, por poca memoria interna, su terminal de gama de entrada se queda en breve espacio de tiempo sin espacio libre y todo son obstáculos en la experiencia con él, es directamente incomprensible que en una gama tan alta como la que representa este iPhone 6s Plus, el modelo de entrada ofrezca la minúscula capacidad interna de 16 GB en pleno 2015.
implementación, ahora mismo es un poco desesperante ir aprendiendo sobre la marcha y basándonos en ensayo-error continuamente. Los desarrolladores tienen muchas posibilidades en sus manos pero tienen que aprovecharlas. Uno de los campos más prometedores es el de los juegos.
También es necesario, al igual que ya ocurriera con los gestos multitáctiles hace unos años, integrar el manejo con diferentes presiones sobre la pantalla en nuestro día a día. Y no es nada sencillo.

Como corresponde a cada nuevo desarrollo de la compañía, Apple es la que más énfasis ha puesto en el 3D Touch en el sistema operativo. Es a quien más le interesa. Las principales aplicaciones de Apple ya integran esta posibilidad y nos ha gustado mucho.
Nos parecen realmente útiles y productivas, básicamente por Apple sí que integra todas las posibilidades del 3D Touch al actual nivel de desarrollo. Además de accesos directos a opciones directamente desde el icono del escritorio, 3D Touch nos deja ayudas bastante bien pensadas como poder previsualizar correos, mensajes e incluso enlaces a webs, a los cuales podemos acceder presionando un poco más en la pantalla. Una vez que te acostumbras y has regulado la presión a tus gustos, es algo que ya no quieres dejar atrás en el manejo de un smartphone.
Requiere que el usuario se reeduque en el manejo del smartphone y hay cierto caos porque no hay continuidad en su uso entre aplicaciones, pero la presión sobre la pantalla nos ha parecido una tecnología acertada y con tremendo potencial
Un ejemplo muy claro: es aplicaciones como Mensajes o Mail de Apple, cuando estamos escribiendo un mensaje, si presionamos fuerte sobre la zona del teclado, éste se convierte en una especie de touchpad. Algo que puede parecer simple se ha convertido es un gesto habitual para poder desplazarme inmediatamente a una palabra o zona del texto, o para seleccionar texto para copiar y pegar de forma más precisa y efectiva.
¿Queréis más ejemplos? Apple tiene a su botón de inicio como uno de los cuellos de botella a la hora de reducir marcos en su terminal. Ahí está Touch ID pero también la manera directa de acceder a la multitarea con el doble clic sobre el botón. Igual en la próxima revisión de diseño que tocará con el iPhone del año que viene, ese botón es candidato a desaparecer.
No sabemos qué hará Apple con la identificación con huella si desaparece ese botón, pero para movernos entre aplicaciones ya tiene la solución implementada gracias al 3D Touch: presionar con fuerza en el borde izquierdo de la pantalla del iPhone y al tiempo deslizar hacia adentro. Si lo hacemos, y no requiere mucha práctica, se nos abre el carrusel de aplicaciones en iOS.
Entre lo más potente del año y con la autonomía esperada
Si hay apartados de las renovaciones del iPhone que no compartimos (si no de forma general, si en aspectos concretos), todo lo asociado al rendimiento es la gran excepción. Año tras año, el procesador del nuevo iPhone demuestra a sus rivales que no todo consiste en sumar núcleos o GB de memoria RAM. Ellos tienen la ventaja del control de la combinación hardware-software y le sacan un partido máximo. Aunque siempre hay quien, como con los megapixeles de la cámara, acaba quedándose solo con el número.
Con el nuevo iPhone 6s Plus se estrena un potente procesador A9, de 64 bits y que cuenta “solo” con dos núcleos a 2 GHz. Para colmo, Apple ha enmendado el peligroso mantenimiento el año pasado de la memoria RAM y en este iPhone 6s Plus ya se cuenta con 2 GB de dicha memoria. Aunque para el rendimiento bruto no afectaba demasiado, hay ya elementos de iOS que necesitaban de esta actualización. Esta mejora la hemos apreciado especialmente en el trabajo con múltiples pestañas en el navegador.
A nivel de rendimiento bruto, Apple y Samsung mandan en sus respectivos ámbitos. Apple por lo que obtiene sin grandes números en núcleos o RAM, y Samsung por todo lo contrario
En términos generales, el SoC A9 con los 2 GB de memoria RAM hacen que cualquier aplicación, ya sea de retoque fotográfico, vídeo o juegos, se ejecute con la máxima celeridad. Y en el día a día no vamos a apreciar problemas de potencia relacionados con el procesador. Tampoco calentamiento del equipo que podamos considerar como alarmante.
Una breve parada a nivel de benchmarks. En GeekBench, el nuevo iPhone 6s Plus saca un 2367 en modo núcleo único y 4149 en multinúcleo, datos que son bastante mejores que los del mismo modelo del año pasado, que estaba en 1542/2588. Con la aplicación Antutu, el iPhone 6s Plus ha conseguido en nuestras pruebas 59276 puntos, situándose en lo más alto de la tabla virtual de este año solo superado por la bestia del Exynos de Samsung que consiguió 61050 en el Galaxy S6 y 70100 en el S6 Edge+.

En todo caso, aunque iOS va perfectamente fluido en el nuevo iPhone 6s Plus, hay algunos momentos en que apreciamos que no está todavía lo afinado que debería en alguna transición (iOS 9.0.2), algo en lo que iOS creemos que ha ido empeorando en los últimos tiempos.
De lo que iOS 9 aporta al iPhone os hemos hablado de forma detenida, así que solamente cabría mencionar las novedades del lado de Siri. El coprocesador M5 integrado en el SoC A9, es ahora el responsable de que Siri pueda estar todo el tiempo escuchando, incluso con el terminal bloqueado. Esta opción la podemos restringir de forma voluntaria.
Si aceptamos que el coprocesador esté atento a escuchar la instrucción que activa Siri, el sistema funciona perfectamente. Ya no es necesario pulsar ni tan siquiera el botón de inicio para que el asistente de Apple se ponga a trabajar. Basta un “Oye Siri” con la pantalla apagada para que podamos darle instrucciones, algo cómodo cuando tenemos las manos ocupadas.
Parece inaudito pero sí, el modelo básico del iPhone 6s Plus tiene 16 GB de almacenamiento interno, algo abusivo y que empeora la experiencia de usuario que tanto importa a Apple
De la ficha técnica del nuevo iPhone 6s Plus hay que mencionar el apartado de conectividad, que sube de nivel en LTE, siendo ahora Cat6, así como en el NFC, mejor pero sin poder usarlo más allá del pago móvil.

Si nos vamos a la balanza negativa tenemos el asunto de la memoria interna. Apple es la única compañía relevante que en la gama alta sigue abusando del usuario con un modelo de entrada de 16 GB sin posibilidad alguna de ampliación de manera externa. Aquí no podemos recomendar en absoluto este modelo, y hay que irse al menos al de 64 GB para no encontrarse con una experiencia de usuario que será bastante negativa en un terminal que quiere que hagamos fotos de más resolución y vídeos 4K que ocupan 300 MB por minuto.
Luego tenemos el tema de la batería. Efectivamente, pese a mantener prácticamente el mismo grosor del modelo del año pasado, la batería reduce su capacidad ligeramente hasta los 2750 mAh. Esto ha sido así porque se requería espacio extra especialmente para el nuevo motor de vibración asociado a la tecnología 3D Touch.
Apple se lo ha podido permitir porque esa reducción de capacidad la ha compensado concomponentes más eficientes que en términos globales hacen que estemos moviéndonos en la misma autonomía que el año pasado y acorde con pruebas de terceros solventes que incluso la ponen un poco por encima.

Como usuario intensivo del smartphone, no ha habido día en que no haya podido acabar la jornada con cerca del 25-30% de batería, lo que me llevaba a una autonomía efectiva y comprobada de casi un día y medio de trabajo. En cifras estamos hablamos de más de 36 horas en espera y unas 9 horas de uso.
Apple incluye un modo de ahorro de energía que básicamente prescinde de animaciones y comprobaciones en segundo plano, que nos salva en situaciones de emergencia pero que no alcanza todavía los niveles de personalización o eficacia de otras soluciones de rivales especialmente bajo Android.
Touch ID: tan rápido que no parece que haya protección
Apple consiguió que su primera iteración con Touch ID del año pasado fuera una tecnología implementada más que correctamente desde el principio. Era fiable, potente y rápida. Pues este año,el nuevo Touch ID mejora más.
Desde el momento en que configuras tus huellas, tarea que hay que repetir con cada iPhone (o instalación de cero) que inicies, es apreciable la velocidad a la que el sistema asimila tu huella. Pero es todavía mejor cuando se usa.

El nuevo procesador a buen seguro que ayuda a que esta segunda generación del sensor de huellas integrado en el botón de inicio sea rapidísima. Sigue siendo necesario pulsar en primer lugar el botón de inicio para activar la pantalla y que luego se identifique la huella con otra pasada, pero el sistema funciona tan veloz que no da tiempo a que levantemos el dedo para posarlo una segunda vez, pues en el camino de levantarlo unos milímetros ya se ha reconocido la huella y estamos dentro del escritorio.
Es directamente algo instantáneo y nos deja con la sensación de que no hay protección por huella.

Más resolución para la cámara, misma idea detrás
Algo que Apple suele renovar de forma importante en sus modelos “s” es la cámara. Tras las comparativas de este año, uno de los aspectos que necesitaba mejorar la cámara de los iPhone era la resolución de su sensor. Y así ha ocurrido con este iPhone 6s Plus.
De los 8 MP hemos pasado a unos más adecuados 12 megapixeles. Aumentamos la resolución para conseguir fotos con mayor detalle, pero el resto de aspectos fotográficos se mantienen. Lo más problemático está en el lado del tamaño del sensor, que no varía, por lo que los fotoreceptores son más pequeños y reciben menos luz cada uno. Apple no ha compensado ese inconveniente con una apertura mayor y la ha dejado fija en f2.2.

La renovación del apartado fotográfico se centra en evitar que la información que recoge cada uno de esos “píxeles” del sensor no contamine a los de al lado. Es parte del éxito de anteriores iPhone junto con el procesamiento de imagen, que una vez más es lo más destacado de la cámara del iPhone. Simplemente fantástico el trabajo una vez que acabamos de pulsar el botón virtual de disparo.
Las imágenes que obtenemos en la mayoría de situaciones son realistas, ahora también con buen nivel de detalle, trabajan bien con rangos dinámicos amplios, y hay acierto casi absoluto en balance de blancos o exposición. Además es una cámara muy rápida tanto en enfoque como en disparo.

Cuando la oscuridad hace acto de presencia, el buen tratamiento del ruido con el que Apple ha sostenido su cámara en escenas con poca luz ya no es suficiente … si miramos lo que hacen algunos rivales de este año, que no se han dormido en absoluto. Apple sigue consiguiendo imágenes muy correctas sin apenas ruido ni pérdida de detalle pero no tener un sensor más grande o más luminoso no le permite competir con lo mejor del año en fotografía nocturna. La cámara del iPhone 6s Plus no es capaz de recoger tanta luz como el LG G4 o especialmente el Galaxy S6 Edge, y con el estabilizador de imagen no basta para compensar.
La evolución de la cámara del nuevo iPhone se ha ceñido a lo mínimo, consiguiendo mantenerse a excelente nivel pero ya sin ventaja alguna
Para colmo la interfaz de la cámara no deja lugar a dudas de que Apple sigue queriendo simplemente una cámara efectiva en apuntar y disparar. No hay opciones para cambiar la resolución de las imágenes, ni para controles manuales más allá de fijar la exposición. Las únicas incorporaciones son la panorámica de más de 60 megapixeles que nos permite recortar escenas sin pérdida de detalle, y la función llamada Live Foto.
Aquí hablamos de un modo de fotografía que, además de hacer la instantánea, graba un par de segundos de vídeo para “dar contexto” a la imagen, según Apple. Habrá a quien le guste mucho esta función y se divierta con el movimiento de las fotos cuando nos desplazamos por la galería del iPhone, pero creo que quedará en anécdota una vez pasado el efecto novedad. Por suerte activar o desactivar esta función está a un clic de distancia.

No pasa ni mucho menos lo mismo con los modos de vídeo. El nulo interés de Apple por otorgar algo de control al usuario en la interfaz de foto ha llevado al absurdo de que para escoger entre vídeo UHD o vídeo 1080, además de los de cámara lenta, haya que pasar por los menús generales dentro de los ajustes.
Con una pantalla sensible a la presión, Apple ha perdido una excelente oportunidad de actualizar el modo de cámara y permitir más control o al menos opciones de configuración directas.

Volviendo a la grabación de vídeo pura y dura, hay muy buenas noticias. Tras ser ya un estándar en la gama alta, el iPhone se atreve con la grabación de vídeo 4K a 30 fps, y este salto lo ha hecho con todas las garantías. Los vídeos que se consiguen, especialmente con el iPhone 6s Plus con estabilización de vídeo, son de altísima calidad. Y si queremos optar por menos resolución, hay modos 1080p incluso a cámara lenta 120 fps o incluso a 240 fps pero ya bajando la resolución a 720p.
Si bien nos alegramos mucho de que el iPhone por fin grabe vídeo en 4K o haga fotos con más resolución, este paso adelante choca frontalmente con la política de ofrecer el modelo de entrada con 16 GB de memoria interna, como os he contado antes. A más de 300 MB por minuto de vídeo en 4K y unos 4-5 MB por foto, va a suponer un verdadero problema para el usuario que opte por esta versión. Eso sí, para disfrutar del vídeo UHD en todo su esplendor toda pasar por una pantalla externa.
Otra mejora fotográfica que parecía increíble que Apple no hubiera llevado ya a cabo en su iPhone la encontramos en la cámara secundaria. Ahora son 5 megapíxeles, un salto enorme respecto a los 1,2 MP de los iPhone anteriores. El toque curioso lo pone el uso de la luz de la pantalla a modo de flash para los selfies, algo que no nos ha acabado de convencer y que nos parece más un fastidio al hacer las fotos que una solución efectiva.
Nuevo iPhone 6s Plus, la opinión y nota de Xataka
Desde el titular dejábamos claras dos ideas respecto a lo que nos había parecido este nuevo iPhone 6s Plus: es el mejor iPhone de siempre pero también el que más difícil tiene vencer en muchos apartados a sus rivales mejor preparados. Que ya son muchos. Y eso no es algo que hayamos podido decir en muchas ocasiones.
El nuevo iPhone 6s Plus es un continuo "bien, pero ..." que dejará muy satisfechos a los que se sienten cómodos en la plataforma iOS pero no será un motivo de cambio de plataforma como podía pasar hasta ahora
Si bien no hay cambios aparentes en el diseño, realmente hay uno muy significativo: el acabado de aluminio que le da más robustez y agarre en mano. Pero esa mejora no puede compensar por sí sola el hecho de que estamos ante el smartphone menos competitivo en peso, altura y anchura dentro de la categoría phablet y entre las marcas relevantes.
En el apartado puramente técnico, procesador y RAM hacen una pareja perfecta pero Apple ha insistido una vez más en mantener la memoria interna de entrada en unos insuficientes 16 GB.

La pantalla de 5,5 pulgadas cumple, sin más, pero recoge un guante interesante que compensa bastante: la tecnología 3D Touch, si se sabe aprovechar, jugará un papel fundamental en cómo manejemos los smartphones de aquí a un par de años.
Y finalmente tenemos la cámara, sobresaliente sí, pero prácticamente igualada en calidad con otros smartphones aunque por detrás en controles manuales, interfaz y opciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario